POR Rodolfo Dzul (Peto)
Les comparto unos momentos de la ceremonia del Jéets méek’en nuestra familia.
Primero agradezco a Genny Cuxin y a Jesús Efraín Dzul Moo por habernos elegido a Lucely Muñoz y a mí como padrinos de Jéets méek’ de bebé Efra, pues al elegirnos nos brindan su confianza total y nosotros al aceptar nos comprometemos desde ese momento a desempeñar un papel importante (segundos papás) en la formación y desarrollo del bebé en todas las etapas de su vida.
Hoy, a los cuatro meses de haber nacido bebé Efra, nos reunimos familiares de Genny Cuxin y míos para realizar la ceremonia. Como padrinos, y de acuerdo con nuestra tradición familiar, acostumbramos llevar regalos para el bebé y procuramos que sean cosas que le puedan ser útiles al recién nacido, evitando obsequiar regalos lujosos que pueden hacer perder la esencia de la ceremonia.
También como padrinos llevamos artículos u objetos para el momento de la ceremonia que consideramos pertinentes que el bebé conozca y aprenda. Estos objetos representan oficios o simplemente deseamos que el bebé lo aprenda a manejar o utilizar o sencillamente tienen un significado. En nuestro caso llevamos los siguientes artículos:
Una biblia y un rosario
Una tijera
Una guitarra
Lápiz y libreta
Un sembrador (xúul) y una cóa
Una computadora
Llaves de motocicleta y de automóvil
Pepita gruesa y huevo cocido
Un lek (calabazo que sirve para guardar las tortillas)
Los objetos fueron depositados en una mesa cubierta con un mantel, una cruz y una veladora. Llegado el momento de la ceremonia los papás nos entregaron al bebé y nosotros lo recibimos con mucha alegría, y a partir de ese momento cargué al bebé y camine alrededor de la mesa dando nueve vueltas del lado derecho. Por cada vuelta tomé uno de los objetos depositados en la mesa y la madrina le fue explicando al bebé para qué le va servir, en qué le puede ayudar o por qué es importante en su vida. Habiendo completado las nueve vueltas la madrina procedió a hacer lo mismo pero girando del lado izquierdo y yo hice las explicaciones. Estas vueltas (derecho e izquierdo) están relacionadas con el cierre de un circulo que guarda relación con nuestra cosmovisión maya.
Habiendo instruido al bebé por medio de la ceremonia se lo entregamos a los papás dando por terminada la ceremonia.
Enseguida pasamos a un convivio familiar donde el centro de atención era bebé Efra (aunque luego se durmió). En estos momentos ambas familias aprovechamos para pasar un rato agradable y una convivencia que pocas veces solemos hacer y estuvo lleno de consejos de los adultos mayores sobre nuestra función como padrinos de bebé Efra.