Pat Boy no se anda por las ramas. A la pregunta cuál es su meta más atrevida, responde: Cantar un día en el Auditorio Nacional. “Ahí demostraremos que los mayas todavía existimos. En las entrevistas nos dicen que ‘los mayas colapsaron’, lo cual es una mentira porque los mayas estamos aquí, sólo que evolucionados y haciendo cosas nuevas”.
Después de cantar dos piezas de rap en maya en la Sala de Arte del Teatro Armando Manzanero, Pat Boy conversa unos minutos con El Chilam Balam en el vestíbulo ya vacío de funcionarios, empresarios y reporteros que no fueron a verlo a él sino al anuncio de los millones de pesos que la CDI gastará en infraestructura en algunos pueblos este año.
Camino a la Cumbre de Tajín 2013 (el 21 y 22 de marzo pasados), Pat Boy y su compañero El Sima Atte (como se le conoce) se han detenido en Mérida donde pasaron la noche, y anuncian que regresarán este 3 y 4 de abril para cantar en La Fundación.
–¿Casado?
–¡No hombre, cómo crees si me está yendo tan bien… ¡
Estaba todavía en la Secundaria cuando comenzó a cantar rap en español, pero poco después descubrió que haciéndolo en maya se le hacía más fácil memorizar las letras, y más tarde tuvo conciencia de que era una buena manera de promover la cultura, de revitalizarla allá donde perdía espacios.
“Cuando veía en Felipe Carrillo Puerto a gente de mi pueblo [José María Pino Suárez] y les hablaba en maya, curiosamente siempre me respondían en español. ¿Pues cómo, me preguntaba, acaso no provenimos de la misma comunidad. Acaso no hablamos maya? Pero aquí se avergüenzan..”
Segundo de siete hermanos, Jesús Pat Chablé comenzó a cantar en maya en 1999 y hoy, con 21 años, es un joven consagrado a la música en maya que cada vez gana más espacio para la cultura maya. “Con la música enaltecemos nuestra cultura, nuestra estirpe… Muchos podemos hacerlo, pero pocos nos atrevemos”, dice con modestia.
Sólo logró terminar la Secundaria porque sus padres no podían costearle más estudios, pero pronto comenzará a estudiar su Preparatoria en el sistema abierto.
En sus ratos libres escucha música, lee, compone y a veces debe ir a leñar, contribuyendo a los quehaceres del hogar. “Mi madre vende chakwajes [especie de tamalitos] en Carrillo Puerto y yo la ayudo de esa forma, pues de alguna manera hay que costear los estudios de mis hermanitos”.
–¿Hay una chica en tus pensamientos… ?
–Ujj, ¡muchas!
–Una en especial..
–No. No quiero distracciones ahora…
Su primera canción en maya fue U kuxtal máayao’ob (La vida de los mayas). Hoy día hay en su haber más de 12 canciones en maya, de las cuales le son muy significativas Junp’éel k’iin mina’anech tin wiknal (Un día sin ti), U muuk’ in kaajal (La fuerza de mi pueblo) .
Pat Boy se gana sus centavos cantando, vendiendo camisetas con su logo y discos con su música, pues “hay que ver cómo sobrevivir”, dice. “Nuestro trabajo vale la pena y merece una remuneración”.
Acompaña a Pat Boy, su amigo Roger Giovani Santos Simá, de Dzulá, Quintana Roo, de 18 años, también compositor en maya. Comenzó a cantar rap en español cuando tenía 15 años y después descubrió la facilidad en cantar en maya. Como Pat, compone y está por grabar un disco. De hecho en el disco que promueven actualmente, Sangre maya, figuran algunas piezas de su autoría.
Tak u taalo’ob (Quieren venir) es una canción inédita en maya en donde critica el saqueo cultural en que están sometidos continuamente los mayas. Pero también tiene piezas feministas, canciones bilingües para que los que no entienden maya también puedan disfrutar la canción.
–¿Hay una chica en tus pensamientos… ?
–Ujj, ¡muchas!
–Una en especial..
–No. No quiero distracciones ahora…
Esta siguiendo los pasos de Daddy Yankie? No vaya a resultar que es shoto…