Mayas del sur de Yucatán reflexionaron sobre el calentamiento climático y las medidas para afrontar las nuevas condiciones que crea, especialmente en el campo y en los tiempos de las milpas y las cosechas.
En una reunión para explicar conceptos relacionados con este fenómeno global, campesinos, productores y ejidatarios de Tahdziu dijeron reconocer estas condiciones y señalaron que el detalle es saber qué hacer exactamente.
Los ejidatarios reunidos, unos 25, también señalaron que al cambio climático se suma el problema de la alimentación, pues antes ellos vivían bien, pero con la llegada de alimentos nuevos y extraños la gente comenzó a morirse de males nuevos, por ejemplo de infartos al corazón y de amputaciones a causa de la diabetes.
Sobre el clima dijeron que son conscientes y que han notado lo que produce estos trastornos. Por ejemplo, “las lluvias deben caer en marzo o más tardar en abril, para luego seguir la secuencia de siembras pero el problema hoy día es que las lluvias se han vuelto erráticas y a veces las lluvias caen hasta junio”, dijeron los campesinos reunidos en la Casa Ejidal de Tahdziu, el domingo 7 pasado.
La Asociación Regional de Silvicultores U kanaantaal Sihnal, de Peto, ha mantenido trabajos en las últimas semanas con campesinos de la región para informar del estrategia nacional REDD+ para la reducción de emisiones de deforestación y de degradación de la tierra, en vistas de una consulta programada para 2015.
Sobre las medidas que tomar, algunos campesinos informaron que desde hace años hacen milpa sin quemar, y en cambio dejan que la caña se descomponga y enriquezca la tierra.
En la actividad que tuvo lugar en la mañana del domingo 7, los ejidatarios también hablaron sobre la importancia de cuidar la tierra y de mantenerla y heredarla a los hijos, pues es vital producir nuestros propios alimentos.
Las parcelas del ejido de Tobxilá ya han sido vendidas casi todas, mientras que en el ejido de Progresito ya se han vendido la cuarta parte, advirtieron.
Conocedores de la naturaleza, los campesinos mayas dijeron reconocer los cambios climáticos con el trastorno en la naturaleza. Por ejemplo, informaron, el año pasado cinco tipos de árboles no dieron flores, lo cual es grave porque son un punto de referencia para la época de hacer las milpas y las siembras.
Un día después, U kanaantaal Sihnal hizo lo propio con campesinos reunidos en Teabo. Alrededor de 40 ejidatarios se dieron cita en la Casa Ejidal y expresaron su preocupación por los cambios climáticos, y se comprometieron a trabajar en equipo para salvar la situación. En los pueblos mayas de Tahdziu y de Teabo los convocados bebieron un vaso de gaseosa y un puñado de charritos.
Las exposiciones en ambas comunidades fueron hechas en lengua maya, lo cual permite que los campesinos se sientan cómodos e interactúen con más libertad y soltura.
Nuevas reuniones se programan en los ejidos para continuar la difusión de la estrategia REDD+ que dirige la Comisión Nacional Forestal (Conafor) en tres estados por el momento: Yucatán, Chiapas y Jalisco.
El fenómeno del cambio climático es una preocupación global, y la estrategia REDD+, impulsado por la ONU y firmado por México, es un instrumento cuyo objetivo es ayudar a reducir la deforestación y la degradación de las tierras.
“U Kanaantaal Sihnal” comenzó a trabajar en 2004 pero se constituyó formalmente en 2006, y desde entonces ha desarrollado con éxito muchos programas sobre desarrollo sustentable. Su área de influencia abarca 12 municipios, casi 80% territorio maya.
Según los especialistas, México es un país con gran vocación forestal pues casi el 70% de los bosques son ejidales, comunales o de pueblos indígenas, de tal modo que una estrategia la implementación y cumplimiento del REDD+ estará íntimamente ligado a los usos y costumbres de cada ejido y comunidad, pues es en sus propiedades donde se implementan la mayoría de proyectos y actividades.