Una mesita con nueve jicarillas en sendas rodajas de aak’ ante tres cruces de madera, ocupan el sitio que ocupaba un héroe maya, Bernardino Cen, en el Museo de la Guerra de Castas de Tihosuco, Quintana Roo.
Así lo constató el cronista en breve visita que hizo al recinto este domingo último de septiembre, junto con unos compañeros de trabajo.
Los empleados del museo seguramente han tenido que afrontar muchas veces la misma pregunta: “¿Qué pasó con el cráneo de Bernardino Cen?”. Por eso, cuando nosotros también la formulamos, se nos respondió enseguida: “El cráneo de Bernardino Cen está guardado en nuestras bodegas junto con otros artefactos de valor. Está en lugar seguro y muy pronto estará de nuevo en su lugar”.
Un poco más adelante, durante el recorrido, un joven guía mencionó que está prevista realizar nueva museografía en 2025, pues –como se sabe– la de ahora fue hecha de manera urgente, por una cuestión de tiempos.
Bueno, pues… Ojalá que sí, y que de nuevo veamos en su sitio el cráneo de Bernardino Cen, y que el visitante, después de un recorrido, regrese a su tierra llevando consigo el verdadero sabor de un Museo de la Guerra de Castas.
Sin embargo, el alivio que nos proporcionó la noticia de saber que pronto se enmendarían las ausencias, se esfumó cuando llegamos a la plaza principal y vimos que Jacinto Pat seguía desarmado ¡después de casi siete años! ¡En la mano del férreo compañero de Cecilio Chí solo figura el mango de lo que fue su machete!
¿Cómo es posible?, se pregunta el cronista. ¿Tan difícil es colocar de nuevo el machete a su mango? Fue en noviembre de 2017 que se supo la noticia del presunto “robo” del machete de Jacinto Pat. La versión sin embargo fue desmentida por la parte oficial. “La pieza está en resguardo y se trabaja para colocarla de nuevo”, se dijo entonces. Pero han pasado casi siete años…
Ojalá pronto la cabeza de Bernardino Cen y el machete de Jacinto Pat salgan de las bodegas y ocupen los sitios que les corresponde.
José Natividad Ic Xec
José Natividad Ic Xec es director de elchilambalam.com y mayapolitikon.com