El Chilam Balam: un Grimm que colecta historias del Mayab con acentos personales

Dos versiones: en español y en francés.

Dos versiones: en español y en francés.

El 21 de diciembre de 2012 fue anunciado por astrólogos estrambóticos como el fin del mundo, según el calendario maya. Claro, este día […] es una fecha importante atestiguada en una estela […] de Tortuguero. Fin de un ciclo y renacimiento, así es que debiera interpretarse esta cita con el Tiempo. Quince días antes se publicó La Mujer sin cabeza, de José Natividad Ic Xec, y quizás aquí estuvo el cambio, al menos para el reconocimiento de la cultura maya. El que estuvo en el Diario de Yucatán y que encabeza hoy el proyecto editorial El Chilam Balam para la difusión del patrimonio del pueblo de Yucatán, quiso recoger las historias de su abuela paterna. Es un Grimm colectando las piezas del rompecabezas de la memoria colectiva, pero con acentos personales.

Leyendo estas historias mayas el lector siente claramente lo maravilloso mezclado con lo pavoroso, pero sobre todo ve cómo el fantástico se arraiga en la cotidianidad de los seres humanos, un realismo mágico en ciernes.

Imagen del PDF que está disponible en la web de ENS

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Un hombre está casado, sin saberlo, con una wáay cuya cabeza se desprende del tronco y se pasea en la noche. El esposo dormido no sospecha nada hasta el día en que se lo revelan y le aconsejan que le ponga sal en el cuello, donde se desprende la cabeza.

En otra parte es un alux, una especie de muñeco tutelar, que no se debe ofender, y que robó la voz a una niña. Así despliega una topografia con sus mil figuras bailantes: la milpa, este pedazo de tierra ganado sobre la selva frondosa ; las víboras maléficas ; el jmeen, el sacerdote maya oficiando junto con el cura católico ; Yuum K’áax, señor del monte, a quien se ofrece maíz…

Todo está atravesado por la « compasión maya », la simpatía hacia seres y cosas también. « Ootsil » – « pobre » dice la madre del autor delante de su viejo volchito estacionado a la intemperie. – Sean James ROSE  (Traducción de francés por Nicole Genaille.)

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